Estaba
pensando que más que nunca debemos estar atentos a este síndrome que se
ha instalado en las épocas postmodernas en algunos hombres y hace un
tiempo considerable también en mujeres.
En
las mujeres y también en hombres, además del que nos ocupa" está el
síndrome de “todo me sale mal”. Juro que conozco casos en que a veces es
muy efectivo padecer de este síndrome porque siempre hay un alma
caritativa que querrá sacarte de ese mundo tan cruel y ofrecerte hasta
tu casa, sobre todo si sos rubia y de ojos celestes o en caso que el
víctima sea de espaldas anchas, musculoso y ...
Está
el síndrome contrario, el que ni bien se lo conoce, cuenta cuántas
propiedades tiene, autos importados, dólares, euros, reales, etc. etc.
(tan necesarios en estas épocas sobre todo por las últimas noticias
conocidas) yate, cuentas bancarias, hasta te dicen la marca de zapatos
que usan...too much, en realidad este síndrome busca a la que todo o al
que todo le sale mal, también para salvarlo y poner a su disposición sus
innumerables dotes y...en este caso no hay y...no es necesario :)
Estan
también las mujeres bellas que salen con sus hijas a pasear y son más
lindas que las hijas...por Dios! Las hay...no sé cual sería el síndrome
que padecen, pero alguno habrá.
Podríamos
estar toda la tarde enumerando síndromes tan actuales como contagiosos y
por esa razón es que queremos iniciar una campaña de prevención de
estas "sindromelogías" (what?), pero el que más nos ocupa en el día de
la fecha es el del "reunido".
Nunca
les pasó llamar a su enamorado y ahora a sus enamoradas, y que les
digan están en reunión. Reuniones de qué que no puedan contestar un par
de minutos o que sus secretarias tengan orden terminante de “pásame el
llamado tal y cual, pero otros no porque estoy en reunión”. Y sí,
estarán en reunión, ¿¿en reunión de que?? Sólo Dios sabe cuando las
reuniones son reales y cuando no y las mujeres solo lo llaman para
decirles que escalarían el Everest si necesitan que lo escalen para
sacar una foto de las alturas. (sería bueno encontrar a Facundo Arana
pero no...:(
Juro
que algunas las hay, me han dicho. Y ésto, en el caso que las mujeres
dispongan del celular de su amado, porque les cuento que se ha
instaurado la costumbre de decir que ni siquiera a sus madres se lo dan,
o que se lo olvidaron den Europa o en La Salada...en fin las mujeres a
veces somos muy crédulas por no decir bol...stop!
Yo
diría que es cierto que están o estamos por contagio "sindromeados"
(¿?) por los "reunidos" que sólo disponen de tiempo para ver los
traseros de sus esculturales secretarias, en realidad de cualquier mujer
que pase un instante por sus ojos.
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