sábado, 25 de febrero de 2012

Imágenes


Hoy te miré y casi no me saludaste, te miré insistentemente y tu mirada era inexpresiva, sentí  bronca, dolor, no podía entender esa expresión indiferente.
Recuerdo cuando lo conocí, siempre me indicabas lo que tenía que hacer, a veces con brillo, a veces con lágrimas, te miraba y  tenías todas  mis repuestas, sin hablar, decías todo.
Ya no sé cuánto pasó de aquella vez....qué feliz,...sentí una enorme  alegría al verlo....quiero recordar ese momento pero ya nada hace que lo pueda  traer a mi mente, mucho menos a mi corazón, ni siquiera recuerdo su mirada...
 Sí, las noches en las que me sumergía en vos  sin hablar, y me aconsejabas  que tuviera calma,  que de alguna forma u otra,  todo se iba a reacomodar.

Pasaron noches y días enteros sin poder casi dormir, eternos días de ausencias y  ya no  te preguntaba nada. Mi vida transcurría sin saber que estabas.

La despedida sin despedida, el adiós sin adiós, nunca más un llamado, nunca nada más de su vida. Lloré mucho hasta llegar acá y darme cuenta de lo que no existió, de interpretar silencios,  palabras ambiguas, mensajes fuera de contexto o sin contenido... lloré, hasta dejé de vivir...ahora  debía  dejar de buscar en vos  y más  en mí.

Comprendí así, que sólo eras mi reflejo, sólo  mi imagen, a veces con brillo otras con sombras.
Lentamente  decidí  así,  alejarme de mi espejo....


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Esperamos tu comentario con agrado...

Salvatore Donadío